Tegucigalpa, Honduras
Entre llantos y aplausos fue despedido un hijo adoptivo de Cantarranas.
Se trata de Luis Joel Rivera Perdomo, de 34 años de edad, estudiante de la carrera de sociología de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), quien se convirtió en víctima de la delincuencia la noche del miércoles en la colonia El Pedregal de Comayagüela.
Rivera Perdomo además era actor y director de teatro, lo que se había convertido en su pasión.
El fallecido fue atacado a balazos por presuntos pandilleros, quienes lo sacaron de su vivienda y luego le quitaron la vida.
Los familiares comentaron que Luis Joel estaba siendo víctima de extorsión y en varias ocasiones lo habían amenazado con quitarle la vida.
El cadáver fue velado en una funeraria de la capital, pero a las 7:00 de la mañana de este viernes fue trasladado a Cantarranas, lugar que lo había convertido en su hijo adoptivo.
A las 10:20 minutos llegó al parque de Cantarranas la caravana de vehículos que acompañaba el féretro y acto seguido se realizó la misa de cuerpo presente en la iglesia católica del lugar.
Antes del oficio religioso, los familiares muy consternados se lamentaron por la muerte. “Dios, ¿por qué le quitaron la vida?... Esto no puede ser”, se lamentaron.
Mientras que los compañeros que se trasladaron desde Tegucigalpa dijeron que lo van a extrañar, pues fue una buena persona.
Luego fue sepultado en el cementerio de la comunidad. El entierro fue a las 12:20 del mediodía, donde familiares y amistades, al ritmo de aplausos, le dieron el último adiós.
Walter Rivera, tío del fallecido, comentó que estaba siendo extorsionado y que antes que le quitaran la vida los familiares marcaron en reiteradas ocasiones al 911 para denunciar que un grupo de pandilleros estaba en el lugar, pero no atendieron la llamada.
Fue hasta que ya le habían quitado la vida que llegaron los policías a la escena del crimen, lo que provocó la ira de las personas que estaban en el interior de la vivienda, al igual que de los vecinos del sector.
Luis Joel Rivera era originario de Tegucigalpa, pero su sueño fue vivir en Cantarranas. Había planificado comprar un terreno para construir su casa y residir con su familia en ese lugar.
Pero esos deseos fueron truncados por las balas que le quitaron la vida y hoy los pobladores de esta comunidad lo van a extrañar porque lo consideraron como “hijo predilecto”.
Edilberto Borjas, residente en Cantarranas, fue uno de los maestros de teatro que inspiró a que Rivera Perdomo abrazara el arte.
Gracias a lo que aprendió de su maestro, Luis Joel tuvo una destacada participación en eventos nacionales e internacionales, donde logró los primeros lugares.
“Joel fue una persona emprendedora, lo que se proponía lo alcanzaba. Uno de sus sueños fue vivir en Cantarranas y estaba a punto de lograr ese sueño, pero lastimosamente le quitaron la vida”, manifestó Borjas.
