Tegucigalpa, Honduras
Pese a las dificultades que se presentaron en algunos centros de votación, las elecciones del partido Libertad y Refundación (Libre) se convirtieron en una fiesta democrática.
Las expectativas se cumplieron a nivel nacional; Xiomara Castro se impuso frente a Rasel Tomé y Nelson Ávila.
En este proceso electoral Libre tenía nueve corrientes internas. Siete de ellas postulaban en alianza a Xiomara Castro, mientras que los otros dos fueron encabezados por Tomé y Ávila.
Menuda tarea tuvo el ente electoral para formular las alianzas en las papeletas.
Eran las 6:00 de la mañana y los representantes de las mesas electorales, ubicadas en las antiguas instalaciones de la Escuela Normal Mixta Pedro Nufio, estaban listos para la apertura de las tres urnas en ese centro educativo.
A medida que pasaba el tiempo, los electores llegaron a depositar su confianza en los candidatos que este novel instituto postulaba en sus diferentes movimientos.
Óscar Valeriano, un joven de 30 años de edad, fue uno de los primeros en llegar a las urnas del partido Libre.
“Vengo a votar cruzado, por los diferentes diputados, por Xiomara Castro y Jorge Aldana, en ellos están puestos las esperanzas de este pueblo”, dijo Valeriano.
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En las calles y avenidas de la capital todo era una fiesta. Los simpatizantes de Libre en las afueras de los centros orientaban a los votantes para ejercer el sufragio.
En otros centros de votación, como en la Villa Olímpica, las condiciones no fueron las mejores, los miembros de dos mesas no tenían el mobiliario necesario para comenzar con el proceso electoral.
Las dos urnas fueron instaladas en el suelo, pero esto no fue dificultad para iniciar con las elecciones.
Los primeros en ejercer el sufragio en esta urna fueron dos ancianos que tienen más de 50 años de casados y que votaron por Xiomara Castro.
“Desde oscuro nos venimos a votar”, dijo don Diego López.
Mientras tanto, en la sede de Libre, en la colonia Humuya, los afines a este instituto político estaban dándole seguimiento a las elecciones a nivel nacional.
Otro de los problemas encontrados en algunos centros de votación es que se abrieron con tres horas de retraso, lo que imposibilitó el normal desarrollo del proceso.
La fiesta democrática de Libre se llevó en completa calma pese a la diversidad de pensamientos, la tolerancia se apoderó de los miembros de la mesas electorales.
La mayoría de los líderes de este partido, que se encontraban en la capital, fueron a ejercer el sufragio en horas de la mañana.
Para el caso, el precandidato presidencial Rasel Tomé llegó a las instalaciones del Pedro Nufio acompañado de su esposa y sus dos hijas. Al filo de las 11:00 de la mañana, Tomé ejerció el sufragio. Al otro lado de la ciudad, en el barrio Abajo de Comayagüela, en la Escuela Panamericana, le tocó votar al precandidato Nelson Ávila.
Ambos precandidatos coincidieron en que luego de las elecciones primarias Libre debe promover la unidad interna del partido
