Honduras

Secretaría de Seguridad rechaza acusaciones de narco preso en Estados Unidos contra Julián Pacheco Tinoco

La institución policial negó este martes que el actual ministro esté involucrado en dichos actos por los que se le señala desde EEUU

07.03.2017

Tegucigalpa, Honduras
La Secretaría de Seguridad, a través de un comunicado, negó este martes las acusaciones hechas por un exfefe de la droga preso en Estados Unidos contra el ministro de esa institución Julián Pacheco.

Pese a que los señalamientos iban inicialmente contra el expresidente Porfirio 'Pepe' Lobo por soborno, el testigo, de nombre Devis Leonel Rivera Maradiaga, involucró en sus denuncias al actual ministro de Seguridad, Julián Pacheco Tinoco -asesor de seguridad en el gobierno Lobo-, y dijo que éste ayudaba a proteger al narcotráfico.

En ese sentido, por medio de un comunicado de prensa, la Secretaría de Estado en el Despacho de Seguridad rechazó 'categóricamente' dichos señalamientos.

Aquí el comunicado íntegro:
La Secretaría de Estado en el Despacho de Seguridad, luego de la difusión en diferentes medios de comunicación social sobre señalamientos de parte del ex cabecilla de la organización criminal “El Cartel de los Cachiros” durante su comparecencia ante un tribunal de New York, en contra del actual Ministro de Seguridad General (R) Julián Pacheco Tinoco, a la opinión pública en general comunica lo siguiente:

1-Se rechazan categóricamente los señalamientos hechos por el señor Devis Leonel Rivera Maradiaga, quien se entregó a la Agencia Antidrogas Estadounidense (DEA) ante la captura inminente por parte de las autoridades hondureñas.

2-Que estas aseveraciones mal intencionadas y sin fundamento alguno lo que pretenden es mermar las acciones concretas que el Estado de Honduras realiza en contra del crimen organizado, con la finalidad de debilitar nuestros entes operadores de justicia.



3-Maradiaga actualmente se encuentra recluido en un centro penitenciario de los Estados Unidos acusado por los delitos de narcotráfico y asesinato y con el propósito de lograr un beneficio en la reducción de su condena está acusando burdamente a funcionarios hondureños comprometidos con el combate al crimen.


4-Reiteramos que este tipo de ataques provenientes de cabecillas de estructuras criminales, no nos amedrentan con sus amenazas y señalamientos infundados y nos compromete a continuar redoblando esfuerzos para mantener la paz y tranquilidad de la población en general.

La Secretaría de Seguridad a través de la Policía Nacional de Honduras, reafirma una vez más su compromiso en la lucha frontal contra el crimen organizado en pro de la seguridad de la sociedad hondureña.

Rivera confesó el lunes 6 de marzo en un juicio que pagó enormes sobornos a cambio de protección al expresidente Porfirio Lobo (2010-2014), así como a su hijo Fabio, quien estuvo presente en dicho juicio, pero negaba las acusaciones.

El testigo sostuvo que en dos oportunidades Fabio Lobo y su seguridad ayudaron personalmente a Los Cachiros a recibir dos cargamentos de droga que llegaron por avión, uno de 400 kilos en 2012 y otro de una tonelada en 2013.

En este último, Devis Rivera dijo que pidió ayuda a Fabio Lobo a cambio del pago de 50.000 dólares porque 'era un cargamento grande y necesitaba la seguridad de él'.

'Yo sabía que si andaba con él todo saldría bien. Me sentía más respaldado de andar con el hijo del presidente', afirmó.

'Me dijo si le podía dar un poquito más (de 50,000 dólares) porque tenía que pagarle al jefe', o sea 'al general Pacheco', dijo Rivera.

Por el pago de la ayuda con el primer cargamento de 400 kg, Devis Rivera dijo que dio a Fabio Lobo un Mitsubishi Lancer color gris blindado, una camioneta Land Cruiser blindada, un fusil AR15 modificado (con mira telescópica y mira láser) y de 20.000 a 30.000 dólares en efectivo.

Detenido en Haití en 2015, Fabio Lobo se declaró culpable de conspiración para importar y distribuir cocaína en Estados Unidos en mayo de 2016.

Puede ser condenado a una pena mínima de 10 años de prisión y una máxima de cadena perpetua.

La pena mínima que enfrenta el testigo es prisión de cadena perpetua más 30 años.