Honduras

El Pozo, la cárcel hondureña de máxima seguridad blindada para cabecillas de maras y pandillas

La penitenciaria situada en el departamento de Santa Bárbara puede albergar 2,000 presos que estarán aislados por completo

19.09.2016

Santa Bárbara, Honduras
Sus muros y rincones están fundidos con concreto hidráulico, sin espacios para las comunicaciones internas, donde cada lugar se encuentra estrictamente monitoreado por cámaras de seguridad, pero sobre todo alejado de cualquier tipo de comunidad.

Se trata del centro penal de máxima seguridad denominado El Pozo, ubicado en el municipio de Ilama, departamento de Santa Bárbara, con una capacidad para 2,000 reclusos.

L. 500 millones

fue el costo de este proyecto ubicado en el occidente de Honduras para descongesionar el hacinamiento en los presidios de Honduras.

De un sanitario, lavamanos y ducha dispone cada celda lo que permite que los presos no tengan que salir de ellas, donde detrás de estas yace una pared construída con bloques de ocho pulgadas y una varilla de media pulgada en medio fusionada. Adicionalmente entre ambas estructuras se hizo otra fundición de unos quince centímetros, haciéndolo un presidio prácticamente blindado e indestructible.

Lea además: Mira en fotos el traslado de los peligrosos reos

Aislarlos
Desde la etapa de construcción se previó que los reos de alta peligrosidad serían trasladados a esta cárcel para aislarlos por completo y así evitar que sigan dando instrucciones para cometer acciones ilícitas.

Según un reciente informe de la Fuerza de Seguridad Interinstitucional Nacional (Fusina), el 80 por ciento de los atentados a empresas privadas, rubro del transporte y otros ilícitos son ordenados desde los centros penales por los cabecillas de maras y pandillas.

Por tal razón, los primeros 37 considerados los más peligrosos líderes de estas asociaciones delictivas fueron enviados este lunes vía aérea de la Penitenciaría Nacional Marco Aurelio Soto (PNMAS) hacia El Pozo mediante un riguroso dispositivo policial-militar.

Entre los reclusos que fueron trasladados se encuentran: Manuel de Jesús Romero, Robin Osmin Bonilla Alvarado, Olman Ariel Laínez, Jordan Keiser Vásquez Valladares, Walter Alexander -pero su apellido no fue precisado-.

Además, se incluyeron en la misma acción otros antisociales identificados solo por sus alias, entre ellos 'Little Calavera', 'Little Wy', 'Little Lazy', 'El Tacoma' y 'El Diablo', al igual que 'Lucifer 18'.

El expolicía Alvaro Ernesto García Calderón también se encontraba entre los que fueron llevados en el dispositivo montado en Támara. García está ligado al desaparecido narcotraficante Héctor Amador Portillo alias Gato Negro y a la Mara Salvatrucha (MS-13).

En Quimistán
EL HERALDO también visitó la megacárcel ubicada Quimistán, en el mismo departamento occidental, cuando comenzó ser construída en el 2014.

El reclusorio se localiza en un terreno de 120 manzanas, pero que solo 35 de ellas son para la penitenciaría, quedando así una propiedad de 85 manzanas.

El recinto carcelario consta de seis pabellones cada uno independiente y está basado en modelos de las prisiones de Estados Unidos, con tres niveles o pisos, puertas elaboradas con varillas de una pulgada que permiten que las autoridades penitenciarias estén más pendientes de los presidiarios para que no hagan nada a sus espaldas.

Además, el penal fue construído a base de contenedores, en los que se habilitaron cuatro celdas que miden cada una 2.45 metros de largo por 3.05 metros de ancho, acondicionadas para dos privados de libertad y todo esto bajo un modelo innovador, incluso ahorrativo.

Foto: El Heraldo

Parte de los cabecillas de maras y pandillas fueron trasladados hasta la penitenciaria noroccidental fuertemente custodiados.
Vea: Así fue la llegada de los reos a penal de Santa Bárbara

El otro lado de la obra
El penal de máxima seguridad, el primero en su tipo en Honduras, cuenta también con dos canchas polideportivas para las actividades recreativas de los presos, talleres para aprender un oficio y se definieron áreas de cultivo, ya que los internos deberán de producir parte de su alimentación.

Sergio Romero, uno de los ingenieros que participó en la edificación del reclusorio, precisó a EL HERALDO que se trabajó en la construcción de una represa con el que abastecerá del vital líquido, garantizando así el suministro de agua potable durante todo el día.

Al mismo tiempo se cuenta con una planta de tratamiento de aguas negras que serán utilizadas en el riego de los cultivos.

La prohibición del ingreso de las visitas a las celdas es una de las medidas de control que se implementará en esta megacárcel, por lo que los agentes penitenciarios llevarán a los presidiarios hasta una sala habilitada que solo tiene sillas y mesas.

Aunque se construyeron diez celdas diseñadas para las visitas conyugales no se permitirá que las esposas de los privados de libertad se queden durmiendo con ellos, tal como pasa en otros presidios.

Dale play y mira el video de la megacárcel

Más fotos de la construcción de este penal de máxima seguridad