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Víctor García de la Concha: 'La lengua es lo más democrático que existe”

Las redes sociales, los chats, Internet y las tecnologías de la información y la comunicación tienen como materia prima la lengua, por lo que el idioma no está en riesgo, considera el director del Instituto Cervantes.

22.09.2012

“Si no sabe con qué ‘v’ se escribe viernes, escriba lunes”. Esta broma plantea la “jococidad” con la que a veces se hace referencia a las reglas gramaticales.

Quizá hablar de acentos, esdrújulas, sobreesdrújulas, sujeto tácito, signos de interrogación y puntuación no sea el condimento que despierta el apetito de muchas conversaciones y ha sido un dolor de cabeza para muchos desde la educación primaria, sin embargo, todos hemos sobrevivido a los cambios en el uso del idioma.

Una de las personas que más sabe sobre el tema es el español Víctor García de la Concha, quien, entre otros importantes cargos, ha estado al mando de la Real Academia Española (RAE) y desde febrero ostenta el cargo de director del Instituto Cervantes, organismo fundado en 1991 que vela por la defensa y promoción de la lengua y la cultura española en el mundo.

García de la Concha habló en exclusiva con la revista dominical Siempre, de EL HERALDO, sobre sus proyectos, los premios que ha recibido en Honduras, su experiencia en la RAE, su nombramiento en el Instituto Cervantes, el VI Congreso Internacional de la Lengua Española a celebrarse en Panamá, entre otros tópicos.

¿Cuáles son sus proyectos a corto y mediano plazo como director del Instituto Cervantes? Hay muchos y algunos se están cocinando ahora mismo, pero me gustaría citar el primero y más trascendental: “iberoamericanizar” el Instituto. Me gustaría que Latinoamérica sintiera el Cervantes como algo propio, y no como una institución exclusivamente de España. Para ello, estamos reforzando la colaboración con todos los países de lengua española. Tenemos que trabajar juntos por unos objetivos que nos benefician a todos.

¿Qué es lo que más destaca de su gestión al frente de la RAE? Sin duda alguna el establecimiento de una relación en pie de igualdad entre la RAE y el resto de las Academias de la Lengua Española. Ello ha permitido, construir juntos una nueva Gramática que, por primera vez es la Gramática del español total; un diccionario de dudas panhispánico, la ortografía común, etc. La fuerza internacional de nuestra lengua proviene principalmente de Hispanoamérica, donde viven 9 de cada 10 hablantes de español.

A través de sus tesis nos hemos dado cuenta que tiene un apego singular por la poesía, ¿cómo definiría usted a esta expresión literaria? Es la literatura en su más alto grado, la creación más poderosa de la palabra.

¿Qué cree que se necesita para ser un buen poeta? Poeta se nace, y después, si uno nace poeta puede mejorar su capacidad.

¿Cuál es su escritor o poeta predilecto? Esto es como preguntar a un niño si quiere más a papá o a mamá. Amo la buena escritura.

¿Qué posibilidades tiene un centroamericano de obtener el próximo Premio Cervantes (el nicaragüense Ernesto Cardenal, por ejemplo)? Ya sabe que hay la tradición no escrita, pero que se cumple siempre de que el Premio Cervantes se concede alternativamente a un escritor español y a uno latinoamericano. En 2011 se premió al poeta chileno Nicanor Parra, así que previsiblemente este año el galardón será para un autor español. Pero, por supuesto podría obtenerlo, ahora o en ediciones siguientes, porque por fortuna tenemos grandes escritores en cualquiera de nuestros países.

Hablando de Centroamérica, usted es una persona muy admirada y respetada en Honduras, tanto así que fue nombrado Huésped Ilustre de Tegucigalpa, con la entrega de las Llaves de la Ciudad; obtuvo la Medalla de Oro de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras y un reconocimiento (Doctorado Honoris Causa en Letras) por parte de la Universidad Pedagógica Nacional “Francisco Morazán”. ¿Cómo han sido sus experiencias en este país? Muy positivas. Colaborando con el gran poeta Óscar Acosta, logramos dotar de nueva sede a la Academia Hondureña, tan activa y de tanto prestigio.

¿Mantiene amistad con los miembros de la Academia Hondureña de la Lengua? Me honro, sí, con esa amistad.

¿Ha leído el Diccionario de Hondureñismos? Por supuesto, y lo manejo en la preparación de la nueva edición del DRAE.

También destaca su incursión en cine, ¿planea algo en este ámbito?
Nunca se deben descartar proyectos que sean apasionantes, pero hoy por hoy mis responsabilidades al frente del Instituto Cervantes absorben casi todas mis energías y mi tiempo.

El próximo CILE (Congreso Internacional de la Lengua Española, 2013) será en región centroamericana (Panamá). ¿Qué aspectos se toman en cuenta para elegir el país sede? ¿Podría ser Honduras la sede en el futuro? ¿Tienen desde ya algunos temas que entrarán en agenda? La primera condición es que el propio país aspirante lo proponga, como en su día hicieron México, España, Argentina, Colombia y Chile. Panamá lo pidió aprovechando que en 2013 celebrará también otras dos citas muy relevantes: el 500 aniversario del descubrimiento del Océano Pacífico por Vasco Núñez de Balboa y la cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno de la comunidad hispanohablante. Honduras podrá, por supuesto, proponerse para acoger un congreso posterior, si sus gobernantes y la Academia Hondureña de la Lengua lo estiman conveniente. En cuanto a los temas, estamos trabajando aún en ellos.

¿A qué cree que se deba el hecho que Cervantes sobreviva a los siglos y sus obras aparezcan siempre entre las mejores? A que seguimos reconociéndonos en sus personajes, a que nos permite conocer mejor aspectos esenciales de cómo somos los seres humanos, a que nos hace reír, a que utilizó de forma magistral nuestra lengua mestiza… Y no hay que olvidar que creó con el Quijote el género por excelencia de la cultura moderna: la novela.

Después de casi cuatro siglos de que Miguel de Cervantes Saavedra murió en la miseria siguen haciéndose ricos los editores de Don Quijote de la Mancha, ¿considera esto como una afrenta a la pobreza del autor o como un precio que debió pagar por su gloria? Me gustaría verlo de otra forma. Si se reedita una y otra vez el Quijote porque es un buen negocio significa ante todo que sigue vivo, que se sigue leyendo, y ese es el mejor destino para un libro.

¿Qué mensaje esperanzador le envía a los nuevos literatos y poetas para perseverar en este ámbito? Que sigan escribiendo, que luchen cada día con las palabras como si fuera el último, que disfruten del proceso creativo de su obra más allá del éxito comercial o los ingresos que consigan por ella. La literatura es muy exigente. Si quieren volcarse en ella, que le dediquen todo el tiempo y el esfuerzo que sean necesarios. Así, como decía Neruda, cuando les llegue la inspiración las musas les pillarán trabajando.

¿Cree que era más puro el idioma de hace unos dos o tres siglos en comparación con el actual? No era ni mejor ni peor, pero, sobre todo el español nunca ha sido una lengua pura, sino mestiza. Ha acogido palabras procedentes de otros idiomas, empezando por las lenguas prehispánicas, lo han hablado personas que procedían de las más diversas culturas, orígenes geográficos, políticos y sociales. De hecho, el que sea una lengua mestiza es una de las razones de su éxito internacional.

¿Considera que el idioma está enfrentando una dura prueba, si se toma en cuenta el apogeo de las redes sociales y los chats? Todo lo contrario. Las redes sociales, los chats, Internet y las tecnologías de la información y la comunicación en general tienen como materia prima la lengua. Hoy se escribe más que nunca, por ejemplo.

¿Será este el siglo en el que se jubile la ortografía, como propuso hace algún tiempo Gabriel García Márquez? Aquella propuesta -si es que puede llamarse así- la lanzó García Márquez en el I Congreso Internacional de la Lengua Española que organizó el Instituto Cervantes en Zacatecas en 1997 para reclamar la atención de los hablantes sobre la lengua y abrir debates. Pues él mismo cuida al máximo la ortografía. Yo creo que nunca se jubilarán las normas de ortografía: son fundamentales para mantener la unidad y la claridad del idioma.

¿Cuáles cree usted que son los mayores retos del español en los últimos tiempos? El español es ya la segunda lengua de comunicación internacional, pero debemos esforzarnos por consolidar esa posición, algo que se juega en gran medida en Estados Unidos. También es fundamental incrementar la presencia del español en Internet y en las tecnologías, aún insuficiente y que no corresponde con los casi 500 millones de hispanohablantes que hay en el mundo. Igualmente, debería aumentar el peso de nuestra lengua en el campo de la ciencia.

¿Qué piensa sobre la manipulación del idioma? Lo que se manipula son las verdades o los mensajes, sea a través del idioma o de otros instrumentos como la imagen. Es tan viejo como el mundo y me temo que siempre se seguirá haciendo.

Algunos críticos consideran que la RAE ha sido muy permisiva en cuanto a aceptar ciertos usos y palabras, ¿usted qué opina? La RAE acepta nuevas palabras o recoge nuevas acepciones de vocablos existentes cuando se ha demostrado su uso por los hablantes a lo largo de cierto tiempo. Los que deciden son siempre los hablantes, porque la lengua es lo más democrático que existe. La Academia ejerce una función notarial o registral.

En esta ocasión es válido que este artículo no termine en punto final, sino en puntos suspensivos, porque aún falta mucho por modificar, permitir, escribir y reflexionar sobre el uso del idioma...

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