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¿Por qué no ser la otra?

Si tienes una decisión que tomar, te presentamos algunas razones para no ser la otra y como zafarte.

17.09.2015

Tegucigalpa, Honduras

Nunca accedas a ser la amante, la otra. Aunque pienses que es el hombre de tus sueños, no lo es. Hay buenos motivos y razones para no que no caigas en su juego, créeme al final nada puede salir bien:

No puede comprometerse contigo

En serio, no. Ya está con alguien más a quien no está dispuesto a dejar. No confundas ‘crush’, enamoramiento o calentura pura con compromiso.

Eso de “me voy a divorciar” es mentira.

Si está casado, él no puede ser “tu media naranja” (ya es de otra… y probablemente ya lo hizo jugo).

Engañar en vez de hablar con su esposa dice como resuelve lo que no le gusta

Es una pista de lo que hará contigo. El hombre no resolverá los problemas, siempre mentirá y usará engaños.

Tener una relación oculta es desgastante

Piensa como te sentirás el día que te esconda porque se encontró a alguien. Además, te pierdes del orgullo de andar de la mano.

No puedes hacerle una cena romántica en su casa, ni mucho menos esperar que te lleve a ese restaurante que tanto te gusta (¡lo podrían ver!).

De hecho, no iras a ningún sitio público con él, como cualquier pareja normal.

Él tiene todo, tú solo le das lo que le falta y recibes las sobras

Tiene una casa con comida y una cama que comparte con su esposa. Ellos juntos tienen hijos… y tú, porque te oculta.

No puedes enviarle un mensaje de texto cuando te provoque ni cuando lo extrañes… no sabes cuando sea su esposa la que tenga su celular.

Si tú lo llamas por teléfono y ella está junto a él, te lo apaga. Si ella lo llama y tú estás junto a él, te pide que te calles.

Los domingos no son para ver películas acurrucada a él. Los domingos son para su familia y la familia de su esposa.

¿Qué beneficios tienes siendo la otra, más que desvalorizarte a ti misma?

Eres víctima de tu propia trampa

Puede ser que él empezó, te busco y te propuso una relación, pero tú también decidiste aceptar la manera en que se relacionan.

No eres una destroza hogares, sólo la cómplice complaciente de uno

Te guste o no, la aceptes o no, tu eres una 'cómplice' en la traición de la confianza de ese hombre hacia su esposa y su familia.

Te engañas a ti misma

Si acaso deja a la oficial, enserio, ¿Quieres una relación con alguien que bota algo tan fácil? Por cierto, siempre te comparará con su esposa...

Su plan de vida es junto a ella. Tú sólo eres un momento.

Serás la mala del cuento

Es más fácil culpar a otros. Si lo cacha su esposa o le entra un golpe de consecuencia, vas a terminar como la 'loca acosadora'.

El tiempo es valioso y no vas a ser joven para siempre

Por andar con un hombre casado se te escapan las oportunidades para construir una relación seria con alguien que te valore y realmente se esfuerce por ti como tú por él.

Como zafarte:

Haz un corte limpio y definitivo:

Dile que ya no quieres seguir en esta relación

Borra todos sus correos, mensajes y chats.

Deja de espiar

No trates de ser su amiga ¡No funciona! Terminaras cayendo…

Prepárate para sus acosos, ruegos y chantajes emocionales

Pide ayuda de un amig@s

Acepta invitaciones a salir con alguien NUEVO y que no tenga nada que ver con él.

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