No podemos ni queremos dejar pasar una información publicada la semana anterior por nuestro equipo de la Unidad Investigativa de EL HERALDO sobre el abandono de dos puentes Bailey valorados en 55 millones de lempiras que la Secretaría de Infraestructura y Transporte (SIT) decidió abandonar, una en la entrada que conduce al municipio de Ojos de Agua, Comayagua, y la otra, en la calle principal que dirige al centro del municipio de El Negrito, Yoro.
Las estructuras de metal, que están corroyéndose en los sitios señalados, eran parte de una millonaria compra de 600 metros lineales de estructuras modulares tipo Bailey valoradas en 137 millones de lempiras (5.5 millones de dólares) que se le encargó a la empresa estadounidense Acrow Corporation of America, en 2020, después del paso destructor de los huracanes Eta y Iota por el territorio nacional.
El equipo está en el país desde 2021, pero increíblemente las autoridades, tanto del gobierno anterior como del presente, se han hecho de la vista gorda, y a pesar de la alta inversión que representó su adquisición para el empobrecido pueblo hondureño, no han hecho nada por colocar las estructuras en los sitios que habían sido señalados, a pesar de la importancia y la necesidad que las mismas representan para la vida diaria de las comunidades a ser beneficiadas.
Las autoridades municipales dicen no contar con los fondos necesarios para la colocación de las estructuras y que las gestiones que han hecho a nivel de la Secretaría de Infraestructura y Transporte y del FHIS han quedado en nada.
Lo cierto es que en este caso, la inoperancia, la ineptitud, la desidia, la negligencia, de las autoridades competentes de poner a funcionar estas estructuras es inaceptable. Se trata de obras de interés público que deberían estar en funcionamiento desde hace mucho. La presidenta Castro debe actuar y urgir a sus funcionarios a tomar las decisiones pertinentes.
