Las teorías de unos y otros (incluidos corruptos impunes) de que la Misión de Apoyo contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras (Maccih) sería desarticulada quedaron disipadas luego que la Sala de lo Constitucional ratificara su legalidad. Unos aplauden la decisión, pero otros –los cabeza caliente- la critican porque solo ellos tienen la razón y la verdad.
En medio de la cultura de la duda quienes atizan odio en el país nunca valoran acciones judiciales ni de ningún otro tipo. Para estas lumbreras –incluidos ciertos cronistas- el fallo del tribunal de alzada es una especie de maquillaje para proteger políticos corruptos. Unos galanes de pasados gobiernos olvidan –por apetito- que nadie engrilló una primera dama.
Desde el encierro de la honorable Rosa Elena Bonilla de Lobo por presuntos actos de fraude, todo el mundo conjeturó su pronta salida tras los aúllos desde El Chimbo donde las aguas siguen turbulentas, amenazantes. Sus abogados y parientes intuyen que es inocente, que nunca robó ni un zapato a la niñez falta, que su caso es una trama política.
Su cautiverio causó un sismo de magnitud mortal en la “clase política”. La Maccih perdió a su vocero Juan Jiménez Mayor, otros están solteros, en fin, no ha dejado de temblar en casonas ni domos del poder. Heide Fulton –encargada de Negocios de la Embajada Americana- dijo en su cuenta de Twitter que la Maccih ha hecho un excelente trabajo y debe continuar.
Tras declararse legal a la Maccih, diversos sectores –incluidos la sociedad civil- loaron la decisión, empero oficiales del Consejo Nacional Anticorrupción (CNA) sospechan que este organismo y la Ucefic ya no tendrán ningún papel protagónico contra los corruptos. ¿Quiénes mienten? ¿Quiénes dicen la verdad?
Todos idean tener la razón. En la CSJ afirman que la Maccih está intacta, los gringos ven que su función ha sido efectiva en el combate a la corrupción, mientras aquellos que se sueñan castos –en cuenta exjefes de justicia- no valen el decreto. Recuerden que varios de ustedes mimaron corruptos en el reciente pasado, así que mejor cierren el pico y punto.
