¡Esas son las bibliotecas! Templos del saber, la lectura, la investigación, para aprender, ilustrarse, aderezando la mente con sapiencia y sabiduría para recorrer la vida y sus caminos.
Los prejuicios de la baja y alta Edad Media están a la moda en nuestra sociedad: la ignorancia, los que la fomentan, en nombre de la religión y otros sectores, que no les convienen la iluminación de la sociedad: (políticos, religiosos que comercian con la fe), algunos empresarios y al GRAN SISTEMA en que el mundo se desenvuelve, las actividades futboleras.
A la gente le gusta ir a las concentraciones, a centros deportivos en lugar de sentarse, cómodamente en su hogar, a leer buenos libros como una enseñanza práctica del arte de leer y aprender.
Lo niños, la juventud hondureña deben de ser inteligentes.
Deben de entender que el mundo presente con todas sus ciencias y tecnologías es para preparar a la sociedad de hoy y del mañana, y estas se encuentran en las bibliotecas, en donde, los beneficiarios llegan a realizar consultas, a buscar préstamo de libros, etc. Aquí podemos recurrir para leer, buscar información, investigar y estudiar.
Actualmente, los servicios bibliotecarios se complementan con la búsqueda de información a través de internet.
En todo caso, las bibliotecas utilizando la consulta de libros digitales.
Las bibliotecas públicas son de una necesidad apremiante para las comunidades rurales, especialmente las ubicadas en las regiones fronterizas de nuestro país.
Atención, a la ilustre y esclarecida, actual directora ejecutiva de Cultura y Artes, Dra. Lina Mancuso: dos comunidades fronterizas: El Oro y El Aguacate, sector norte de Santa Bárbara, urgen de una biblioteca.
Contactos: alcaldesa de Nueva Frontera, Delmy Reyes, y alcalde de Azacualpa, Carlos Sandres, y los ciudadanos: profesor Ballardo Vega y Rafael Heliodo Valle (de Visión Mundial), en Nueva Frontera, Santa Bárbara.
