Mundo

Fuertes protestas sacuden elecciones en México

Maestros de un sector radical y otros grupos lograron anular los comicios en un pueblo de Guerrero.

FOTOGALERÍA
07.06.2015

Tixtla de Guerrero, México

Las elecciones locales y legislativas de México arrancaron este domingo con incidentes en el sur del país, donde maestros de un sector radical y otros grupos buscan sabotear la jornada y ya lograron anular los comicios en un pueblo del estado de Guerrero (sur).

Los incidentes, que incluyen el bloqueo de casillas (centros de voto) y el incendio de boletas electorales, ocurren a pesar del operativo del Ejército y la Policía Federal desplegado por tierra, mar y aire para resguardar los comicios.

En el pueblo de Tixtla (40.000 habitantes) la autoridad electoral de Guerrero tuvo que suspender la elección después de que padres y compañeros de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, desaparecidos en septiembre, impidieran desde el amanecer la instalación de casillas.

En otros puntos del sur, maestros llevan a cabo acciones de boicot para exigir al presidente Enrique Peña Nieto que derogue su reforma educativa, una de las banderas de su mandato que busca enfrentar los graves problemas del país en este ámbito.

Estas elecciones son el primer gran test electoral para Peña Nieto, en el que espera mantener la mayoría de su partido PRI en el Congreso, pero también un examen a su compromiso de recuperar la paz en el país.

A pesar de las protestas, el Instituto Nacional Electoral (INE) -organizador de los comicios- reportó que el 99,95% de las casillas pudieron ser instaladas para que los 83 millones de votantes inscritos elijan a sus 500 diputados federales (cámara baja del Congreso federal), los gobernadores de nueve de los 32 estados y casi 900 alcaldías.

Después de depositar su voto en la capital, Peña Nieto dijo que hay reportes de 'incidentes aislados' en el país pero que 'resulta bastante satisfactorio saber que la gran mayoría de las casillas se han instalado'.

Quema de casillas

En el estado de Guerrero algunos grupos han focalizado sus protestas en la colusión entre políticos y el crimen organizado, de lo cual el crimen de Ayotzinapa fue el más crudo ejemplo.

En Tixtla, padres de los 43 estudiantes de magisterio y compañeros, algunos de ellos encapuchados, se llevaron la papelería de al menos tres casillas y quemaron las boletas electorales de una de ellas, sin que se observara presencia de las fuerzas de seguridad, constató la AFP.

Posteriormente se enfrentaron a pedradas con un grupo de personas que llegó armado con palos para impedirles seguir con sus acciones.

Los padres de los 43 estudiantes, que desaparecieron en medio de un ataque policial ordenado por el alcalde de Iguala (Guerrero), exigen al gobierno que los encuentre con vida, pese a que la fiscalía concluyó -con base en la identificación de los restos de uno de los jóvenes y otras pruebas- que todos fueron asesinados y sus cuerpos incinerados por narcotraficantes.

En el vecino Oaxaca, el principal objetivo del despliegue del gobierno, manifestantes irrumpieron el domingo en una veintena de casillas de la región y quemaron las boletas, las urnas y las mamparas de cartón, según la policía estatal.

En la turística ciudad de Oaxaca, miles de maestros participaban en una marcha de la Coordinadora de Trabajadores de la Educación (CNTE), una corriente radical del sindicato nacional a la que pertenecen los maestros inconformes.

Los profesores llevan más de un año en pie de guerra contra la reforma educativa de Peña Nieto denunciando que les quita derechos laborales adquiridos.

Los comicios culminan la campaña electoral más violenta que se recuerda en México, en la que al menos cuatro candidatos o precandidatos a cargos electivos fueron asesinados, tres de ellos en Guerrero y otro en Michoacán (oeste), dos estados asolados por el narcotráfico.

La tarde del sábado, a horas de la elección, al menos 10 personas murieron durante un ataque armado perpetrado en Xolapa (Guerrero) por policías comunitarios contra una facción rival, un hecho que las autoridades atribuyeron a una pugna territorial y no a las elecciones.

Test para Peña Nieto

Los comicios son una prueba de fuego para Peña Nieto (2012-2018), cuyo Partido Revolucionario Institucional (PRI) se perfila para mantener la mayoría junto a sus aliados en la Cámara de Diputados pese a recientes escándalos de corrupción.

La gran novedad en estos comicios es el estreno de la figura de candidatos independientes. Uno de ellos, Jaime Rodríguez 'El Bronco', es uno de los favoritos en las elecciones a gobernador del estado industrial de Nuevo León (noreste) gracias a su carisma, su imagen ranchera y su discurso contra la corrupción en la política.

'La raza (la gente) ya está cansada y puede reaccionar. Yo voy a encabezar lo que la gente quiera', dijo 'El Bronco' a la prensa antes de votar, mientras montaba en su caballo en el municipio de García, del que fue alcalde.