El expresidente estadounidense Barack Obama vuelve a intervenir a favor de su Partido Demócrata: este jueves participa por primera vez desde su partida del gobierno en una reunión de recaudación de fondos para el partido, un acontecimiento que sin embargo será de carácter privado.
Barack Obama hablará en una reunión de un nuevo organismo del partido, el National Democratic Redistricting Committee, dirigido por su exsecretario de Justicia Eric Holder.
Su misión es financiar las próximas batallas electorales a nivel local en los estados de la Unión, con el propósito explícito de controlar el estratégico diseño de las circunscripciones electorales para elegir el Congreso, que tendrá lugar después de 2020.
Las 435 circunscripciones en las que se eligen los miembros de la Cámara de Representantes se vuelven a definir cada diez años, tras el censo de cada década. El próximo tendrá lugar en 2020.
Son los Legislativos de los estados los que diseñan esas circunscripciones. Y los republicanos controlan actualmente las asambleas locales de 32 de los 50 estados.
'Restaurar la equidad en nuestra democracia defendiendo mapas electorales más justos y más inclusivos es una prioridad del presidente Obama', explicó su portavoz, Kevin Lewis, en un comunicado a varios medios.
Barack Obama, de 55 años, se ha mantenido en un discreto segundo plano desde su partida de la Casa Blanca el 20 de enero.
Tras tres meses de vacaciones, en abril participó en una conferencia en Chicago para hablar de su fundación centrada en problemáticas juveniles. Pero al margen de algunos comunicados y tuits sobre temas como el sistema de salud e inmigración, evitó hacer comentarios directos sobre la gestión de su sucesor, Donald Trump.
