Al menos 200 vecinos de la colonia Altos de Loarque hicieron suya la lucha que emprenden los conductores de las unidades ilegales de transporte.
Con pancartas en mano en las que exigían al gobierno la aprobación de los permisos de operación para los denominados buses “brujitos”, los vecinos protagonizaron una protesta en la calle principal de la zona, a inmediaciones de la posta policial.
Y es que, a las protestas que vienen realiznado conductores y dueños de unas 250 unidades, desde hace dos semanas, se sumó ayer el clamor de los usuarios en las colonias en la que estas unidades prestan servicio.
Tráfico infernal
Desde las 8:00 de la mañana hasta las 3:00 de la tarde de este lunes, la salida al sur se vivió un caso vial.
Pompilio Coello, dirigente de los rapiditos ilegales explicó que las personas apoyan a los ruleteros porque son los únicos que les ayudan a movilizarse, ya que a la zona no entran los rapiditos.
Además agregó que son pocas las unidades que ellos solicitan se unan y legalicen a través de la nueva Ley de Transporte, aún en discusión en el Congreso Nacional.
“Si nos dejan por fuera no hay manera de que estas personas tengan transporte, ya que ningún motorista se va arriesgar a pagar multas dos salarios mínimos”, expresó.
Informó también que son 12 las rutas que ellos cubren en la cual no hay más medios de transporte y que serán sacrificadas por la no inclusión.
“Este tema no es de legalizar miles de unidades es de prestar un servicio donde nadie más lo hace, no podemos llamarnos competencia, lo único que necesitamos es trabajar honradamente” acotó Coello.
