Dos pacientes que sufrieron quemaduras considerables en el incendio del 20 de febrero en la Feria del Agricultor y el Artesano en la capital de Honduras, se encuentran aún en estado crítico.
Personal médico del Hospital Escuela Universitario (HEU) informó que 'los que están delicados son los pacientes adultos', quienes presentan quemaduras hasta en un 70% del cuerpo, la mayoría de tercer grado.
'Todas las capas de la piel están quemadas, no hay nada de circulación y sobre todo las quemaduras en la vía aérea, es decir el aparato respiratorio superior: la nariz, la boca, los labios y todo lo que es la laringe', señaló el especialista Omar Mejía, uno de los médicos que atiende a las víctimas del siniestro.
El galeno explicó que en estos casos el organismo sufre diversas fallas, principalmente en los riñones y pulmones debido a la gran temperatura a la que se expone el cuerpo, además de la destrucción de tejidos que deriva en una descomposición de la misma y la presencia de bacterias.
'La mayoría de pacientes necesitan hacer hemodiálisis inmediatamente para preservar la función del riñón y toda esa inflamación que se produce, empezar a sacarla. Comienza a darse edema pulmonar y falla de pulmón', detalló.
Las probabilidades de vida en casos con quemaduras de 70% en el cuerpo, son de apenas el 20%.
El domingo, otras dos de las víctimas de la explosión de un chimbo de gas en el popular mercado, fallecieron a causa de fallas renales y paros cardíacos.
En total, suman siete los fallecidos tras el incendio. El viernes pasado murió Gustavo Zelaya, de 26 años, empleado de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH).
Un día antes perecieron Devi Berríos Girón, de 30 años, y Enoé Lilibeth Brizuela, de 21. Mientras Briana Dolores Ramos, de 2 años, y Thelma Murillo, de 83, perdieron la vida horas después de la tragedia.
Al menos 14 de los afectados aún permanecen hospitalizados en la Sala de Quemados del HEU.
