Tegucigalpa

La Maratón del Saber llegó a la aldea El Jobo

Los 90 alumnos de la escuela Lempira recibieron zapatos nuevos y útiles escolares

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11.04.2013

La ruta de la esperanza y el compromiso con la educación que desde hace diez años asumió EL HERALDO a través de la campaña La Maratón del Saber, nos llevó a la pintoresca aldea de El Jobo, en el municipio de Orocuina, Choluteca.

En este lugar, separado de la capital por 170 kilómetros, impecablemente vestidos con su uniforme que recuerda los colores de la Bandera Nacional, 90 alumnos de la escuela cuyo nombre le hace honor al primer defensor de nuestra soberanía: Lempira, esperaban con ansias la visita de Soli-Diario.

El día anterior, Santos Heriberto Molina, director del centro educativo fundado en 1960, les dijo a sus alumnos: “Mañana vamos a tener una visita importante... Prepárense”.

Los niños no cabían de la alegría y muchos de ellos, como Josué Rafael Corrales, del cuarto grado, no pudieron dormir, pensando en quién o quiénes llegarían a su escuela.

Llegó el día

¡El día esperado llegó! Las dudas de Josué Rafael y de los demás alumnos quedaron despejadas a las 10:00 de la mañana, cuando frente a su escuela se estacionó un vehículo. Era el equipo de La Maratón del Saber que, con el apoyo de la Fundación Buckner Honduras, les llevaba un importante donativo.

De esta manera llegó el día de obtener los útiles indispensables para continuar el año escolar y hacer a un lado los zapatos rotos y gastados de tanto uso por unos nuevos. La entrega del donativo se convirtió en una fiesta que los menores jamás olvidarán. Formados por grados uno a uno recibieron sus zapatos nuevos y mochilas donde venían cuadernos, lápices, borradores, sacapuntas y colores, entre otros útiles necesarios.

Con júbilo, y mientras revisaba su nueva mochila, la pequeña Tatiana López expresó: “Ya tengo los útiles que necesitaba y que mi mamá no me podía comprar”.

Las palabras de agradecimiento para un medio de comunicación con responsabilidad social y a favor de la educación no se hicieron esperar, y de estas se encargó don Concepción Lagos, habitante de la comunidad. “Agradecemos de todo corazón a EL HERALDO por acordarse de nosotros y apoyar la educación en nuestra lejana comunidad”, dijo.

Así, Solidario cumplió una vez más su compromiso con la educación.