Honduras

Un video muestra a cuatro sicarios de Berta Cáceres

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07.05.2016

Tegucigalpa, Honduras
Un video conocido en la audiencia inicial en el caso de asesinato contra la ambientalista Berta Cáceres muestra a cuatro personas que ingresan a la vivienda de Cáceres el día de su muerte.

La lideresa indígena fue asesinada el pasado 3 de marzo en su casa de habitación ubicada en La Esperanza, Intibucá. El día del crimen, Cáceres se encontraba en compañía del también ambientalista de origen mexicano, Gustavo Castro, único testigo del sangriento hecho.

De acuerdo a información proporcionada a EL HERALDO, en la madrugada del sábado fiscales del Ministerio Público presentaron un video en el que se muestra a cuatro personas ingresando al hogar de Cáceres.

La fuente confió que el material visual fue obtenido por la Agencia Técnica de Investigación Criminal (ATIC) de las cámaras de seguridad de la colonia en la que residía la ambientalista.

Detalló que la imagen muestra, además, el ingreso del vehículo que fue utilizado por los supuestos sicarios para cometer el acto delictivo. Este automotor también está en posesión de las autoridades para su debido análisis.

El material visual fue parte de las múltiples pruebas, al parecer irrefutables, que el Ministerio Público presentó en la audiencia inicial de cuatro de los cinco capturados por este crimen.

La kilométrica jornada judicial inició el viernes a las 9:30 de la mañana con la presencia de los cuatro imputados, las hijas de la fallecida, Bertha y Laura Zúniga, y sus apoderados legales.

Como observadores participaron también representantes del Alto Comisionado de Derechos Humanos, de la Unión Europea y un parlamentario finlandés.

La audiencia se extendió hasta las 3:30 de la madrugada del sábado y fue reanudada a las 10:00 de la mañana.

La resolución

Pasadas las 3:00 de la tarde, el abogado Omar Menjívar, apoderado de la familia Cáceres, informó que la audiencia había concluido.

El togado detalló que la resolución se conocería este domingo a las 4:00 de la tarde.

En ese dictamen el juez podría determinar un auto de formal procesamiento con prisión preventiva o con medidas distintas a la cárcel, o también podría dejarlos en libertad bajo la figura de sobreseimiento definitivo o provisional.

Durante la entrevista con los medios, el togado hizo referencia a una sexta persona imputada, sin embargo, las autoridades de la Fiscalía informaron que hasta el momento solo hay cinco personas capturadas en este caso y otros acusados, pero prófugos.

Los cuatro enjuiciados en esta audiencia son: Sergio Ramón Rodríguez Orellana, gerente social, ambiental de la empresa Desarrollos Energéticos S. A. (DESA).

También el teniente retirado de las Fuerzas Armadas de Honduras, Douglas Geovanny Bustillo, quien se desempeñó como subjefe de seguridad de la misma empresa.

Además, compareció el mayor de las Fuerzas Armadas, Mariano Díaz Chávez, quien en la actualidad se desempeñaba como instructor de la Policía Militar del Orden Público (PMOP) y miembro de las Fuerzas Especiales. El cuarto encausado es Edilson Atilio Duarte Meza, contratado supuestamente como sicario.

A todos ellos se les dio captura el pasado lunes cuando la ATIC puso en marcha la Operación Jaguar, con operativos paralelos en Tegucigalpa, La Ceiba y Trujillo.

Dos de ellos, Rodríguez y Edilson Duarte guardan prisión en la Penitenciaría Nacional Marco Aurelio Soto, mientras uno de los militares está retenido en el Segundo Batallón Táctico Especial en el valle de Támara y el otro en el Primer Batallón de Infantería.

La familia de Cáceres solicitó que los militares sean también enviados a la Penitenciaría.

El gemelo
Ese mismo lunes se capturó a Emerson Eusebio Duarte, hermano gemelo de Edilson Duarte.

A este se le encontró en posesión del arma homicida, pero para ese momento la Fiscalía desconocía que esa era la pistola con la que asesinaron a la ambientalista.

Sin embargo, Emerson fue procesado en La Ceiba por el delito de tenencia ilegal de armas y fue enviado a prisión con detención judicial.

Con un análisis de balística, la Fiscalía comprobó que las ojivas encontradas en el cuerpo de Cáceres coincidían con el arma que tenía Emerson.

En tal sentido el Ministerio Público pidió en la audiencia inicial una ampliación del requerimiento y acusó a Emerson por asesinato en perjuicio de Cáceres y asesinato en su grado de tentativa contra el testigo protegido.

Emerson fue trasladado desde La Ceiba a Tegucigalpa la noche del viernes y fue recluido en la Penitenciaría Nacional, aún no se le realiza la audiencia de declaración de imputado por el crimen de Cáceres.