Tegucigalpa, Honduras
Doña Azucena Ramírez coloca dos porciones redondas de masas de maíz llenas de quesillo sobre la plancha negra de su nuevo ecofogón, mientras revisa que se mantenga vivo el fuego que arde por los pedazos de leña de roble.
Así como la laboriosa señora, la mayoría de vendedores del área de cocina retomaron el viernes su actividad en la Feria del Agricultor y el Artesano, tras ocho días del trágico incendio que ha apagado la vida de cinco personas y dejó unos 60 quemados.
De esta forma, 43 de los 49 establecimientos de comida del mayoreo encendieron sus nuevas estufas ecológicas para ofrecer los platillos a la clientela, reportó Julián Banegas, presidente de la Junta Directiva de la Feria.
Banegas recordó que el incendio por una fuga de gas de un cilindro LPG perjudicó nueve establecimientos, de los cuales solo cuatro se reincorporaron a las actividades.
Mientras que los restantes cinco negocios pertenecen a los locatarios que resultaron con lesiones de mayor gravedad y todavía permanecen hospitalizados o en recuperación, explicaron sus compañeros del mayoreo.
Adaptación
Cabe mencionar que la sección de cocinas todavía no ha se acondicionado totalmente al funcionamiento de las estufas ecológicas donadas por el gobierno, aclaró.
“Arrancamos con lo que pudimos -explicó el directivo-, pero estamos claros que las chimeneas deben salir por el techo y utilizar leña que produzca menos humo”.
En tanto, para las cocineras, la elaboración de alimentos cambiará un poco en el método, pero no en el ritmo de trabajo diario, comentó Azucena Ramírez, locataria del punto.
“La leña la conseguimos en las colonias donde vivimos y cocinar así es un poquito más lento, pero vale la pena porque tenemos más seguridad”, explicó la señora.
Incluso, estimaron que a largo plazo ahorrarán, ya que cada pedazo de leña cuesta entre tres a siete lempiras, mientras que el cilindro de gas se cotiza a 209.77 lempiras esta semana.
Sin embargo, los daños físicos, las dificultades emocionales y las pérdidas materiales se presentan como dificultades para los mercaderes.
