Con el pago de una fianza por 13 millones de lempiras, el exministro de Obras Públicas, Transporte y Vivienda de Honduras, Rosario Bonano, podrá defenderse en libertad de las acusaciones por irregularidades durante su gestión que le fueran interpuestas por la Fiscalía.
La orden de captura fue girada contra Bonano a mediados de diciembre de 2014 por el Juzgado de Letras de lo Penal, a raíz de un requerimiento fiscal presentado por el Ministerio Público por los delitos de abuso de autoridad y fraude en perjuicio del Estado de Honduras.
La Fiscalía Especial contra la Corrupción acusó al exfuncionario basada en un informe del Tribunal Superior de Cuentas (TSC) que señala irregularidades en el proyecto “Construcción y pavimentación carretera La Esperanza-Marcala, sección II” entre el 28 de julio de 2003 y el 30 de septiembre de 2009.
La investigación señala que las exautoridades de Soptravi, dependencia estatal dirigida entonces por Bonano, no ejecutaron las garantías de fiel cumplimiento y anticipo, pese a haberse vencido el contrato de construcción sin que se concluyeran las obras contratadas.
Tampoco se aplicaron multas por el desfase presentado en la ejecución de las obras, se hicieron modificaciones al contrato cuando ya había vencido su vigencia anterior y se renovaron garantías cuando ya habían prescrito.
Luego de que se emitiera la orden de captura, el representante legal del exministro de Soptravi presentó un recurso de casación a raíz del cual se le ordenó el pago de la milllonaria fianza, sin desvanecerse los cargos en contra del imputado.
Hoy, durante una audiencia de presentación voluntaria, el acusado comprobó el pago de los 13 millones de lempiras a favor del Estado de Honduras, de los cuales cuatro millones se hicieron en efectivo y el resto en bienes.
Con la autorización judicial fue suspendida la orden de captura y alerta roja emitidas, aunque el proceso judicial para confirmar o descartar la responsabilidad de Bonano en los ilícitos, sigue vigente.
