Dos empleados de una compañía de cable recibieron este miércoles una descarga eléctrica que por poco acaba con su vida cuando realizaban labores de rutina en Puerto Cortés, en la zona norte de Honduras.
Los afectados se encargaban de conectar el cable para señal de televisión en la zona central del principal puerto de Honduras donde las líneas de alta tensión alcanzan los 32 mil watts de potencia, de acuerdo a información proporcionada por los expertos.
Ambos fueron asistidos de inmediato por un médico y remitidos a un centro asistencial de la ciudad puerto.
Personal médico informó que los hombres sufrieron quemaduras considerables en el cuerpo.
De acuerdo a medios locales, los trabajadores no tocaron las líneas del suministro eléctrico y los daños les fueron provocados por una explosión en uno de los postes del tendido público.
En octubre pasado, un electricista murió cuando reparaba lámparas en una cancha de fútbol de la colonia La Cañada de la capital de Honduras.
Mientras en julio de 2013, un obrero que realizaba labores de reparación en el Seminario Mayor, al sur de Tegucigalpa, tocó por accidente una línea de alta tensión y falleció producto de la descarga eléctrica.
