Tegucigalpa, Honduras
Tegucigalpa. En el juego de póquer, Olimpia sacó cuatro ases y, tras lanzar una bomba lacrimógena en el corazón del cumpleañero, ha ganado con entera suficiencia el partido que tiene prohibido perder: 4-1 regalo del intruso menos deseado de la fiesta azul.
Hasta el minuto 16 todo transcurría entre el nervio del sistema central olimpista y las insinuaciones de Kevin López, el ex-Choloma que raptaba la espalda extraviada de Javier Portillo para dilapidar dos enormes oportunidades.
Fue amo y señor...
Apenas recompuesto, Olimpia empezó a entender que la zaga del enemigo también era una tarjeta de invitación para atacar; y su tándem Meza-Quioto dedujo que la tarea había que empezarla temprano.
Dieciséis minutos y una alfombra de oro para el primer grito: David Meza la hizo de cirujano, encontró la rendija entre Wilmer Crisanto y el aleluya y Romell Quioto rebanó con una dulzura que asustaba a Sebas Portigliatti; el campeón robusteció su ego y ni siquiera la tapada de Sebas a Guerra (penal por mano de Juan Pablo Montes) pudo bajar las revoluciones de esta artillería que ya traía 10 goles en los cañones.
Cabe recordar que el Olimpia venía de golear a mitad de semana por 6-0 al Alpha United por la Concacaf Liga de Campeones.
Antes de que finalizara el primer tiempo, Anthony Lozano se llenó la cara de furia y de zurda detonó un proyectil autopropulsado de grueso calibre que ya no pudo evitar el bueno de Sebas Portigliatti.
Frutilla del postre...
Con rabia en la boca, el León no quiso tener compasión y liquidó el pleito en el último latido de la etapa A: segunda alfombra roja y lingote de oro para la definición del Choco.
Para los que pedían al “9” del Olimpia, pidió la avivada de Javier Portillo, quien rompió el off side al sacar de banda tan rápido como pudo.
El ex-Valencia español ha regalado luego una jugada de primer mundo, eludiendo a Juan Pablo Montes con un movimiento de cintura de crack y definiendo de zurda, casi sin ángulo, para dejar de rodillas al mejor jugador del rival.
Enseguida, los ambientes eran disparejos: en Motagua, el aire se podía cortar con un cuchillo de lo tenso que estaba y Lucas Gómez apenas pudo disimular el dolor al 63 con un certero cabezazo, al que no pudo llegar Donis Escober (antes de que los mismos protagonistas se enfrentaran al 52 desde el manchón penal, pleito saldado a favor del uno).
Olimpia, en cambio, puso el piloto automático y dejó que Mariano Acevedo gritara su gol (otro golazo, tras pase milimétrico de Quioto) y la Ultra se fuera cantando con alegría después que Héctor Vargas destapara su póquer de ases y sentenciara un derbi caliente.
Alineaciones
MOTAGUA: Sebastián Portigliati, Wilmer Crisanto, Juan Pablo Montes, Henry Figueroa, Orlin Peralta, Reinieri Mayorquín, Irvin Reyna, Carlos Discua, Omar Elvir, Kevin López y Lucas Gómez.
OLIMPIA: Donis Escober, Kevin Álvarez, Fabio de Souza, Mariano Acevedo, Javier Portillo, Bryan Johnson, Oliver Morazán, David Meza, Omar Guerra, Rommel Quioto y Anthony Lozano.
