Hondureños en el Mundo

'Regresaré a Honduras y sembraré mi propia tierra, como lo soñé', hondureño bajo TPS

Un hondureño comparte cómo el TPS le cambió la vida. Hoy debe esperar junto a su familia por un milagro para quedarse en EE UU, si no ocurre, deberá volver a su país y cambiar el carro de basura en el que labora por el tractor

05.05.2018

Washington, Estados Unidos
Pedro es un ingeniero agrónomo que Honduras no logró aprovechar para hacer prosperar la tierra y él no tenía recursos para trabajar en lo suyo. Con uno de los tantos cambios de gobierno, se quedó sin trabajo y en vista de las responsabilidades con su esposa y su hija decidió salir a buscar mejores horizontes. Su brújula desde Choluteca, solo le indicaba el norte.

Como la mayoría de inmigrantes indocumentados, Pedro no traía equipaje, pero si muchas deudas y una desesperación por encontrar el mejor camino para hacer recursos en el menor tiempo posible y así ayudar a su familia.

Pedro cambió el tractor por un camión recolector de basura, la diferencia parece enorme entre trabajar la tierra y recolectar basura; pero en el país de las oportunidades todos los trabajos tienen su valor.

Las personas que más lograron aprovechar fueron quienes gozaron desde 1999 del Programa de Protección Temporal (TPS) otorgado bajo el gobierno del aquel entonces Presidente Bill Clinton, el cual les fue renovado 13 veces y que el 4 de mayo el gobierno de Estados Unidos anunció su fin , dejando a las puertas de la deportación a más de 44.000 hondureños.

El encuentro
Eran como las 4:00 de la tarde, lo llamé para conversar y estaba terminando su trabajo, “no puedo pararme en cualquier lado con este camión me indicó”, sígame y pararé donde considere que si se puede y así lo hice.

Nos encontramos en una calle de las que él recorre cada día en Alexandria, Virginia, buscando los desechos reciclables de las viviendas, porque aquí es obligatorio hacerlo. Estacionó su camión, se bajo y vino hasta la parte de atrás, adelante quedaron sus compañeros de trabajo, los que se bajan a buscar la basura, Pedro es el conductor de la Unidad.

De inmediato supe que era un hombre joven, un poco tímido; pero muy educado. Comenzamos a conversar y me expresó su preocupación por la cancelación del TPS. “Es algo muy triste porque tendremos que dejar toda una vida aquí, 24 años en este lugar. Aquí nació mi segunda hija. Me parece tan paradójico, que mientras otros están migrando para acá, a nosotros nos están sacando”.

De acuerdo con el anuncio, los hondureños protegidos por este programa tendrán un plazo de 18 meses para resolver su situación migratoria o si no quedarán expuestos a la deportación. Este tiempo dará también a las autoridades hondureñas la oportunidad prepararse para el regreso de sus ciudadanos.

El Departamento de Seguridad Nacional de EE.UU (DHS por sus siglas en inglés) ayudará a facilitar una transición ordenada y a implementar un proceso de educación y de sensibilización para la reinserción de esta población hondureña, que ha estado fuera del país por más de 20 años y quienes en algunos casos no tienen ningún patrimonio para volver o recursos para comenzar de nuevo.

Se paró de frente al sol, con sus anteojos oscuros. De fondo estaba su camión el cual se mantuvo encendido durante nuestra plática. Usaba uniforme y gorra, creo que pensó que le diría que se la quitara y el mismo la puso sobre el camión.

Le pregunté por qué no había arreglado antes su estatus para estar más seguros él y su familia en este país y me respondió que nunca esperó que esto sucediera; pero que ya está buscando el patrocinio de la empresa para la que trabaja.

Esa será su salida, ya que su hija ciudadana Americana aún es menor de edad y no puede ayudarle, mientras que su hija que llegó de Honduras está amparada por el DACA (siglas en inglés del Programa de Acción diferida para llegados en la infancia).

Lo que hace el TPS
“El TPS nos cambió la vida, porque si yo no hubiera tenido un medio para trabajar, en lo que yo trabajo, hubiera sido mucho más difícil. Haciendo esto se gana mucho dinero, antes de tener TPS yo ganaba unos 25 mil dólares al año, y ahora un poquito más de 90mil dólares anuales, porque tengo una licencia para camiones pesados y eso es uno de las bondades del TPS. Hay que hacer la salvedad que así como gano así se gasta y así se pagan impuestos. Ahora esperemos en Dios que todo salga bien con nuestra salida legal', expresó.

“Estamos haciendo todo que está a nuestro alcance por lograr tener un estatus permanente, no quiero que mi familia se exponga a quedarse indocumentada aquí, es terrible ser invisible, estar escondido, vivir con el pánico que un día estemos en la casa y llegue a deportarnos el ICE (Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de los Estados Unidos por sus siglas en inglés). No es saludable vivir con ese estrés, yo prefiero regresar a Honduras, aunque la situación no esté tan bien como quisiéramos; pero es nuestra patria y gracias a Dios todos estos años pudimos invertir nuestro dinero.”

Y el otro tema importante es el económico, porque cuando en cada estado, en cada condado, en cada ciudad y el país entero, cuando vean cuanta gente está dejando de aportar a la economía, cuanta gente tendrá que cerrar sus empresas, dejando a mucha gente sin empleo. O cuantas empresas se quedarán sin trabajadores calificados.

'Si no les importó el rostro humano de la separación de familias, entonces debemos de mostrar el impacto económico que generaremos si nos vamos, porque somos miles, somos gente luchadora, incansable y así a lo mejor valoran la mala decisión que han tomado de cancelar el TPS', manifestó.

Sonó su celular y eran sus compañeros para decirle que querían irse ya. Entendí el mensaje y rápidamente le pedí que me cuente sobre su plan A, su plan B y su plan C por la cancelación del TPS.

Sonrió y dijo: Plan A: “Nosotros somos cristianos y nuestro Padre celestial sabrá que hará con nuestras vidas. Lo importante es que nos mantengamos unidos como la familia que somos”. Plan B: “Esperamos que mi empleador pueda darnos su respaldo, como lo estamos gestionando, así cambiaremos de estatus y no nos quedamos desamparados”. Plan C: “Si Nos toca regresar a nuestra casita en Honduras, nos vamos de regreso. Entonces tendré nuevamente que cambiar de actividad. Dejaré el camión de la basura y retomaré el tractor, solo que ahora será para trabajar en mi propia tierra, como lo soñé siempre”.