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Terroristas abatidos en Barcelona llevaban falsos cinturones explosivos

Ninguno de los interpelados ni de los presuntos autores muertos eran conocidos por la policía por hechos vinculados al terrorismo, pero algunos tienen antecedentes judiciales por delincuencia

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19.08.2017

Madrid, España
Los autores del doble atentado mediante atropellamientos masivos en Cataluña habían formado una presunta célula en un pueblo cerca de los Pirineos que planeaba ataques aún más mortíferos, según los primeros elementos de la investigación.

La policía difundió el viernes la identidad de tres de los cinco atacantes abatidos y de un fugitivo.

Se trata de hombres jóvenes, todos radicados en un mismo pueblo catalán de unos 10.000 habitantes, Ripoll.

Younès Abouyaaqoub es objeto de muchas interrogantes porque no fue detenido. Tiene 22 años, es marroquí, nacido en Mrirt. Se ignora su grado de involucramiento.

Moussa Oukabir, de 17 años, nacido en Ripoll pero de nacionalidad marroquí, su vecino Mohamed Hychami, de 24 años, también oriundo de Mrirt, y Said Aallaa, de 18 años, nacido en Naur en Marruecos, murieron la noche del jueves tras atropellar transeúntes con un Audi A3 a toda velocidad en el balneario de Cambrils.

El automóvil se estrelló contra un vehículo de la policía y un policía los mató.

Otros cuatro sospechosos se encuentran detenidos: tres marroquíes y un español. También son jóvenes: 21, 27, 28 y 34 años.

Entre ellos figura Driss Oukabir, hermano mayor de Moussa, detenido el jueves. Otro detenido es un español oriundo del enclave africano de Melilla, uno de los principales viveros de yihadistas en España, al igual que Cataluña, donde al parecer se formó el grupo.

Criados en Cataluña

La mayoría parece ser habitantes de larga data de Cataluña y no vinieron de lejos para perpetrar los atentados, aunque los mismos hayan sido reivindicados por el grupo Estado Islámico.

La región de España con la comunidad musulmana más importante es Cataluña, con unos 500.000 musulmanes sobre un total de 1,9 millón a fines de 2016, según la Unión de comunidades islámicas de España.

Es la región con más detenidos con vínculos yihadistas, junto con Madrid y los enclaves de Ceuta y Melilla en Marruecos.

+Atacantes prentendían derramar más sangre en Barcelona

Sin antecedentes terroristas

Ninguno de los interpelados ni de los presuntos autores muertos eran conocidos por la policía por hechos vinculados al terrorismo, pero algunos tienen antecedentes judiciales por delincuencia.

En la casa familiar de Melouiya, el pueblo del que es originaria la familia Oukabir situada en una región rural pobre del Atlas, en el centro de Marruecos, el padre, Said Oukabir, dijo estar 'consternado'.

La ciudad en que vivía la mayoría de ellos, Ripoll, es una pequeña localidad tranquila que vive de servicios e industria, de unos 10.000 habitantes --entre ellos cerca de 1.200 extranjeros-- al pie de los Pirineos, a unos cien kilómetros de Barcelona. Dispone de una mezquita desde hace años.

El hombre oriundo de Melilla fue por su parte detenido en Alcanar, a 200 km al suroeste de Barcelona, donde el jueves de mañana se derrumbó una vivienda tras una explosión que dejó un muerto y siete heridos.

Se hallaron en el lugar unas treinta bombonas de gas, según un fotógrafo de AFP.

El hombre que murió a causa de la explosión también podría formar parte de la célula.

Otra persona estaría vinculada al grupo, pero la policía está tratando de verificar si murió en la explosión.

Otros dos asaltantes que fueron abatidos no han sido identificados.

¿Aprendices?

Según la policía, el grupo al que habrían pertenecido los autores de los atentados fabricaba un artefacto explosivo para perpetrar 'atentados de mayor envergadura'.

La explosión los condujo, al quedarse sin material, a cometer atentados en Barcelona y Cambrils de manera precipitada, 'que no fueron de la envergadura que ellos planeaban', según Josep Lluis Trapero.

Armados con cuchillos

Los cinco sospechosos abatidos en Cambrils llevaban falsos cinturones de explosivos.

Según algunos expertos, su objetivo era tal vez asegurarse de morir como mártires, ya que la policía no vacila en disparar contra los que llevan explosivos. Aunque también pudo ser una táctica para intentar ganar tiempo frente a las fuerzas del orden.

También llevaban en su vehículo un hacha y cuchillos, con los que hirieron a una persona en la cara, antes de ser abatidos.

Tres vehículos alquilados por los atacantes fueron por otra parte recuperados por las fuerzas del orden y estaban siendo analizados el viernes. Las personas que se ocuparon de arrendar el vehículo también están siendo investigadas.