TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Por si fuera poco la deuda política a la que son acreedores los partidos después de un proceso electoral, ahora podrían tener acceso a un fondo y bonos adicionales. Así lo contempla la propuesta de la Ley para la Participación Política y Electoral presentada al Congreso Nacional por el disuelto Tribunal Supremo Electoral (TSE).
EL HERALDO tuvo acceso al proyecto de esta normativa en cuyo artículo 30 se crea el Fondo para el Fortalecimiento de la Democracia “para garantizar el libre funcionamiento de las organizaciones políticas”.
Aunque no se especifica un monto, establece que este nuevo beneficio se conformaría por una partida anual que no solo servirá para el funcionamiento permanente de estas instituciones, sino también para la formación y a su vez capacitación de sus miembros, incluyendo el fomento del liderazgo de mujeres y de la juventud.
Al mismo tiempo, este dinero se emplearía para el financiamiento de los partidos políticos en los comicios generales.
Bonos
Mediante bonos electorales, los partidos tendrán derecho a este Fondo, cuyo valor se calculará sobre la base de 20 lempiras por cada sufragio válido en el nivel electivo más votado en las elecciones generales más recientes, de acuerdo con el artículo 32 del marco legal.
Si esta disposición estuviera en vigencia implicaría que solo el Partido Nacional recibiría 28.2 millones de lempiras por este concepto al multiplicarse el valor base por las 1,410,888 marcas que obtuvo esta fuerza política en el nivel presidencial durante los comicios de 2017.
Mientras que 27.2 millones de lempiras se agenciaría el partido Libertad y Refundación (Libre). La deuda política que es la contribución otorgada por el Estado a los partidos es calculada en la actualidad con base en 39.39 lempiras y se multiplica por la cantidad de votos válidos.
Por otro lado, un Fondo General de Procesos Electorales y de Consultas Ciudadanas surge con esta ley y se destinará para el Consejo Nacional Electoral (CNE) con el fin de garantizar su independencia administrativa, funcional y financiera en votaciones hasta consultas ciudadanas, es decir, plebiscitos o referendos.
