Al menos ocho personas murieron en dos masacres registradas en distintos hechos la noche de este viernes en el norte de Honduras.
El primer suceso ocurrió alrededor de las 7:30 de la noche en San Pedro Sula, Cortés, donde fallecieron cinco personas tras recibir una nutrida balacera.
Las víctimas fueron identificadas como Carmen Yessenia Discua, Saul Antonio Pineda -conocido como el Coqueto-, Alberto Hernández, Jock Portillo y el hijo de este, Josué Portillo, según información proporcionada por los familiares.
Inicialmente se manejaron tres muertos, pero luego las autoridades policiales detallaron que el número asciende a cinco.
La masacre se registró en la siete calle del barrio Suyapa de San Pedro Sula, en la esquina opuesta al supermercado Junior, según información preliminar.
Versiones preliminares
Medios locales detallaron que en el lugar se produjo un choque entre un conductor de taxi y una motocicleta, conducida por el joven Josué Portillo.
El muchacho llamó a su padre Job Portillo para que le auxiliara en el accidente, quien llegó a bordo de una camioneta roja al lugar.
Sin embargo, cuando el papá llegó a ayudar a su hijo, desconocidos dispararon sin mediar palabras contra las personas presentes.
Miembros de la Policía Nacional manifestaron que al menos cuatro individuos que andaban en un camioneta color blanca realizaron el ataque con armas de grueso calibre.
Autoridades contabilizaron al menos 80 casquillos de AK-47 en el sitio y el conteo continuaba al filo de las 9:00 de la noche.
Según versiones, el papá del joven trabajaba en el mercado Guamilito y ya había sobrevivido a un atentado contra su vida.
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Alrededor de las 9:30 de la noche se reportó otra masacre en Puerto Cortés, donde murieron al menos tres personas, según versiones preliminares.
Este año se han registrado un centenar de masacres en Honduras. Merece recordar los homicidios múltiples ocurridos en El Hato de Enmedio y La Rosa de la capital.
El jueves pasado se reportó el asesinato de dos hermanos en la colonia Lomas de Toncontín de Tegucigalpa, supuestemente vinculado a un caso de extorsión, donde salió a la luz incluso una tenebrosa carta de amenaza.
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