Enrique Gardez, el hondureño al que YouTube y el maquillaje le cambiaron la vida

TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Miró su espejo, tomó un par de brochas, eligió una paleta de sombras y su rostro cambió. Aún faltaba: con una gran precisión colocó sus pestañas postizas y se transformó. Enrique Gardez nos brindó una auténtica clase de maquillaje en la sala de redacción de El HERALDO.

Enrique es un joven de 21 años originario de Goascorán, Valle, que descubrió su pasión por el maquillaje gracias a la famosa youtuber Nikkietutorials.

-¿Pero los hombres maquillan?
-Sí, y lo hacen muy bien, la envidia de cualquier mujer.

Un día llegó a un video de YouTube de Nikkietutorials. La influencer maquillaba sola la mitad de su cara y bastó para cambiar su vida.

'Me mostró el poder del maquillaje, la seguridad y la autoestima que da el maquillaje', reveló sentado erguidamente vistiendo una camisa a cuadros.

El estudiante de Psicología dijo que lleva dos años en el mundo de los colores, el brillo y las brochas. Pero que la decisión de automaquillarse la tomó hace seis meses. Vivir de ello no era su objetivo.

El sureño confesó que todos sus conocimientos los ha adquirido de manera empírica, y que la fórmula para ser el mejor en lo que se hace es la práctica.

'Todo lo que he aprendido es por YouTube. Yo le digo a la gente que esto es más que todo que a ti te guste, si a alguien le gusta algo que lo haga, porque lo va ha aprovechar muchísimo, esto influirá mucho en la técnica', reveló el maquillador.

El tiempo corría y la magia iba surgiendo. Primero unas cejas perfectas, seguido de unas sombras impresionantes, para finalizar con una impecable aplicación de base.

Entre 850 a 1,000 mil lempiras cobra Enrique por un maquillaje.

Lucha
Aunque actualmente Enrique Gardez goza de las mieles del éxito, unos meses atrás la historia era otra.

Entre risas el maquillista relató que cuando decidió iniciar en este mundo, sus padres no lo apoyaron, por el temor a que las personas se burlaran de él. -Un hombre maquillándose en una sociedad machista, no sería bien visto-.

'Cuando le dije a mi mamá ´quiero ser maquillador´, inmediatamente ella me dijo que no. Para comprar mi primer maquillaje tuve que vender mi celular y dije ´quiero una paleta y unas brochitas´, mi mamá enojó muchísimo', expresó.

'Practicaba en mis amigas, luego me salió mi primera clienta y con lo que ella me pagó empecé a comprar cositas (maquillaje). También compraba cositas para revenderlas y de la ganancia compraba maquillaje', reveló.

Pero con el éxito, también vienen las críticas. Enrique dice haber sido víctima de señalamientos por salir a la calle usando maquillaje. Muchos de los malos comentarios provienen de hombres, contrario a lo que pasa con las mujeres, quienes alaban sus habilidades.

Sin embargo, esto no ha afectado su forma de ser, ya que el conocedor se describe como 'un chico extrovertido, me gusta conocer lugares y hacer amigos', descripción que es validada en sus redes sociales.

Este joven vive su propio cuento de hadas, de ser un fanático del maquillaje pasó a vivir de esto 'un cambio 360'.