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Honduras y El Salvador juntos en nuevo espacio

El embajador Juan José Figueroa se despide del país con la presentación de una muestra que reúne el talento de ambas naciones en una nueva sala binacional de arte

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16.08.2018

Tegucigalpa, Honduras
A casi dos años de que se inaugurara la Sala Binacional de Arte Francisco Morazán, en septiembre de 2016, el embajador de El Salvador, Juan José Figueroa, se despide de Honduras con el traspaso de la misma a un nuevo espacio cultural.

“Estamos reinaugurando una plataforma en la que hemos invertido un gran esfuerzo por demostrar que el arte y la cultura pueden ser uno de los ejes que unan y fortalezcan a nuestros pueblos”, expresó el diplomático.

Han sido más de 200 artistas, tanto hondureños como salvadoreños, los que han tenido la oportunidad de exponer sus obras en este proyecto, que en esta ocasión recopila el trabajo de los creadores Elías Díaz (Honduras) e Isaías Mata (El Salvador).

Ambos exponentes presentan una muestra individual a base de técnicas como el dibujo y la pintura. Díaz, con cinco piezas de la serie “Hordas”, y Mata, con 10 obras de la exposición “Sueños”.

Como de costumbre, la exhibición estará presente por mes y medio, seguida de un lapso de quince días para acondicionar la próxima obra. “Cada dos meses inauguramos una exposición diferente en esta sala, con la diferencia de que en septiembre se abren las puertas a exposiciones colectivas”, comentó Figueroa.

Agradecimiento especial
“Yo termino mi misión en Honduras y quiero dejar este legado para que en la Embajada de El Salvador se continúen haciendo esfuerzos por enlazar aún más la amistad que hay en nuestros países”, dijo el diplomático.

“Quiero agradecer de manera muy franca y sincera el apoyo que EL HERALDO nos brindó durante estos últimos dos años. Compartiendo este tipo de actividades están promoviendo verdaderamente los valores de nuestros pueblos”, finalizó.

Muestra vigente
La exposición conjunta fue inaugurada el martes 14 de abril en la Embajada de El Salvador ubicada en la colonia Rubén Darío, de Tegucigalpa, donde continuará en vigencia por mes y medio.