Estados Unidos
Pese a su fama, sus lujos, sus múltiples reconocimientos y su lugar imborrable en la historia de la industria del cine o la música, muchas celebridades no pudieron escapar de la pesadilla de ser diagnosticadas con altos niveles de azúcar en la sangre.
En el marco del Día Mundial de la Diabetes (DMD), que se celebró ayer, le presentamos una recopilación de historias de lucha de famosas personalidades que, tras haber recibido una noticia que les cambiaría la vida, decidieron no dejarse vencer y afrontar la enfermedad de manera positiva.
Tal es el caso de la ganadora del Oscar, Halle Berry, quien fue diagnosticada con diabetes tipo 1 en 1989, luego de entrar en coma durante una filmación. Sin embargo, la enfermedad no la detuvo para participar en alrededor de 40 películas. Además de aplicarse inyecciones de insulina, la actriz es muy estricta con su dieta, su plan de ejercicios y sus prácticas de yoga.
Asimismo, la bella actriz de 54 años, Sharon Stone, padece diabetes tipo 1 desde que era una adolescente. Le fue diagnosticada tras la presencia de síntomas persistentes como dolor de cabeza, sudoración, taquicardia, debilidad, temblores, etc. Lejos de que esto se convirtiera en un obstáculo para su vida y su carrera, Stone lo tomó como un desafío y se convirtió en vocera de la enfermedad.
Con apenas 13 años, a Nick Jonas se le diagnosticó diabetes tipo 1 en 2007. El cantante presentaba síntomas como pérdida de peso y mucha sed, por lo que se le realizó un examen que reveló un nivel de azúcar en la sangre superior a 700, cuando lo considerado normal es entre 70 y 120. Jonas fue internado y luego debió aprender a vivir con el padecimiento, cuidar más su alimentación y hacer más ejercicio.
Por su parte, Tom Hanks confesó: “Tengo diabetes porque fui un idiota”. El protagonista de Forrest Gump fue diagnosticado con diabetes tipo 2 en 2013 y afirmó que la causa podría ser el constante cambio de peso debido a la exigencia de sus papeles.
Pese a su fama, sus lujos, sus múltiples reconocimientos y su lugar imborrable en la historia de la industria del cine o la música, muchas celebridades no pudieron escapar de la pesadilla de ser diagnosticadas con altos niveles de azúcar en la sangre.
En el marco del Día Mundial de la Diabetes (DMD), que se celebró ayer, le presentamos una recopilación de historias de lucha de famosas personalidades que, tras haber recibido una noticia que les cambiaría la vida, decidieron no dejarse vencer y afrontar la enfermedad de manera positiva.
Tal es el caso de la ganadora del Oscar, Halle Berry, quien fue diagnosticada con diabetes tipo 1 en 1989, luego de entrar en coma durante una filmación. Sin embargo, la enfermedad no la detuvo para participar en alrededor de 40 películas. Además de aplicarse inyecciones de insulina, la actriz es muy estricta con su dieta, su plan de ejercicios y sus prácticas de yoga.
Asimismo, la bella actriz de 54 años, Sharon Stone, padece diabetes tipo 1 desde que era una adolescente. Le fue diagnosticada tras la presencia de síntomas persistentes como dolor de cabeza, sudoración, taquicardia, debilidad, temblores, etc. Lejos de que esto se convirtiera en un obstáculo para su vida y su carrera, Stone lo tomó como un desafío y se convirtió en vocera de la enfermedad.
Con apenas 13 años, a Nick Jonas se le diagnosticó diabetes tipo 1 en 2007. El cantante presentaba síntomas como pérdida de peso y mucha sed, por lo que se le realizó un examen que reveló un nivel de azúcar en la sangre superior a 700, cuando lo considerado normal es entre 70 y 120. Jonas fue internado y luego debió aprender a vivir con el padecimiento, cuidar más su alimentación y hacer más ejercicio.
Por su parte, Tom Hanks confesó: “Tengo diabetes porque fui un idiota”. El protagonista de Forrest Gump fue diagnosticado con diabetes tipo 2 en 2013 y afirmó que la causa podría ser el constante cambio de peso debido a la exigencia de sus papeles.
