TEGUCIGALPA, HONDURAS.- El proceso de cultivo de camarón de la empresa más grande que opera en Honduras está en manos de una mujer. Nancy Murillo ocupa desde hace tres meses la jefatura de Granjas Marinas Larvicultura (GML). No obstante, su mayor logro profesional en una industria acuícola dominada por hombres es haberse convertido en la primera mujer en desempeñarse como jefe de una camaronera en el mundo, específicamente de la finca Cadelpa, que fue su anterior puesto.
Ese cargo, el que ocupó en el periodo 2016-2019, le valió una serie de reconocimientos internacionales a ella y al Grupo Granjas Marinas (GGM).
Víctor Wilson, CEO de GGM, sostiene que el nombramiento de Murillo como jefe de una finca camaronera dejó una serie de logros a ese grupo empresarial. Agrega que Murillo se ganó el respeto de los compradores internacionales por la calidad del camarón entero, pelado, sin cabeza y cocinado que exportan.
Sus resultados en la finca le permitieron escalar a la jefatura de Granjas Marinas Larvicultura, que se ubica en Los Delgaditos, Marcovia. Sus primeros pasos en la camaricultura se remontan al 2005, cuando fue nombrada jefe de un sector de producción de 170 hectáreas.
En 2011 ingresa a laborar a Granjas Marinas, en donde ahora tiene la responsabilidad de producir la materia prima para que la empresa coseche al año 39 millones de libras de camarón.
Cada día Murillo dirige en el laboratorio un equipo de 300 personas para producir entre 60 y 70 millones de nauplios -larvas de camarón-. Al año son 17 billones de nauplios y siete billones de larvas para cultivar 6,322 hectáreas de camarón en 341 lagunas de engorde en Namasigüe, Marcovia y Monjarás, Choluteca. Su experiencia profesional como jefe de finca le permitió conocer con precisión los volúmenes de larvas necesarios para que Granjas Marinas pueda cumplir con la entrega de los pedidos en más de una veintena de países en Europa, Asia y América.
GGM exportó el año pasado 21.7 millones de libras, con una generación de alrededor de 100 millones de dólares. Para 2019 el volumen exportado de esta empresa puede oscilar entre 21.5 y 23.5 millones de libras. Superar esas metas comienza en las manos de Murillo y en su trabajo en el laboratorio de larvicultura
