Dinero & Negocios

¿Cuál será el futuro del trabajo?

07.08.2018

Tegucigalpa, Honduras

¿Se ha preguntado si sus hijos y sus nietos tendrán acceso a la buena fortuna y las oportunidades que usted ha disfrutado durante su vida profesional? En una época de crecimiento económico mundial sólido, puede parecer paradójico que enfrentemos una crisis existencial en torno al futuro del trabajo.

Pero el ritmo de la innovación se acelera, y los empleos del futuro -en unos pocos meses o pocos años- exigirán habilidades específicas y complejas. El capital humano llegará a ser cada vez más un recurso valioso. En pocas palabras, la naturaleza cambiante del trabajo y cómo preparar mejor a las personas para los empleos del futuro son algunos de los desafíos más difíciles que enfrentan los países.

Les presento aquí algunas ideas sobre el contenido del informe “La naturaleza cambiante del trabajo”, el que espero los haga reflexionar acerca del futuro del trabajo:

Primero, aunque el peligro del inminente y generalizado desempleo causado por la tecnología es una quimera, en la actualidad se están perdiendo trabajos y se pierden debido a la automatización. Pero la tecnología también crea nuevas oportunidades y mejora continuamente las condiciones de vida mundiales. El mundo está mejor conectado, las aspiraciones aumentan, y las opiniones discrepantes tienen más probabilidades de ser escuchadas.

Segundo, las habilidades requeridas para el trabajo cambian, literalmente, cada día. Los nuevos empleos exigirán habilidades específicas: una combinación de conocimientos tecnológicos, capacidad de resolución de problemas y pensamiento crítico, al igual que habilidades interpersonales como la perseverancia, la colaboración y la empatía.

Invertir en el capital humano es el mecanismo fundamental para asegurar que la próxima generación esté preparada para los cambios continuos del trabajo; sin embargo, demasiados países no invierten lo suficiente en estas áreas críticas, en particular durante los años formativos de la infancia cuando se forja rápidamente la capacidad de adquirir nuevas habilidades.

Tercero, deberíamos asegurar que las oportunidades, como el talento, se distribuyan de manera equitativa en todos los segmentos de la sociedad. Una de las maneras básicas para garantizar esto es proteger a las personas a través de programas de asistencia social y sistemas de seguros que se adapten a la naturaleza cambiante del trabajo. El actual modelo no funciona en la mayoría de los países en desarrollo, y además parece cada vez más obsoleto en la mayor parte de las economías avanzadas.

Los contratos sociales también se relacionan con la inclusión, lo que significa que los ricos tienen que pagar la proporción de impuestos que les corresponde. Si no existen suficientes ingresos tributarios, los gobiernos no pueden cumplir con el actual contrato social.