TEGUCIGALPA, HONDURAS
La región está creciendo de forma sostenida, pero el desempeño ha sido desigual e insuficiente para mejorar la calidad de vida en los países.
Por eso “es necesario considerar una reconfiguración sustancial de la agenda de políticas para el crecimiento de la región”, concluyeron ayer los participantes de la XV Conferencia Regional de Centroamérica, Panamá y la República Dominicana del Fondo Monetario Internacional (FMI).
Se deben transferir recursos hacia exportaciones más creativas o la exportación de servicios comercializables (servicios de turismo, salud y bienestar).
Para esto “se requerirá instituciones más sólidas; infraestructura más eficiente, robusta e integrada; condiciones de vida más seguras; un desarrollo de carácter más ecológico y la conservación del capital natural y cultural”, detalla el documento.
“Para que cualquier estrategia de crecimiento sea factible, los responsables de la política económica deben abordar la excesiva disparidad del ingreso en cada país mediante sistemas de protección social eficientes (es decir, pensiones y salud) y un acceso universal a los servicios básicos”, coincidieron los participantes en la conferencia regional.
Advirtieron sobre el impacto del cambio climático, que “es un reto mundial que caracteriza este siglo y es inseparable de otro: la reducción de la pobreza”.
Además, los esfuerzos en la región deben concentrarse en contener el crecimiento excesivo del crédito, los descalces de monedas y vencimientos, y en respaldar balances bancarios robustos. Asimismo, estuvieron de acuerdo en seguir impulsando la flexibilidad cambiaria a medida que aumenten los precios del petróleo a fin de proteger la posición externa. Es decir devaluar las monedas para generar más divisas.
Avances
En Honduras se ha avanzado en reducir el déficit fiscal, la inflación, aumentar la recaudación de impuestos y una mejora en las condiciones de endeudamiento, según Wilfredo Cerrato, presidente del Banco Central de Honduras (BCH).
El funcionario justificó que los aumentos aplicados a varios impuestos, como a los combustibles, ha permitido nivel de inversión pública nunca antes vistos.
Esto a su vez, según Cerrato, impulsó el crecimiento económico y la generación de empleo.
También se disminuyó la pobreza extrema a través de los programas sociales.
No obstante, el presidente del BCH consideró que se debe “estar muy atentos a que no se nos vaya a distorsionar lo que hemos hecho en tanto años”
