TEGUCIGALPA, HONDURAS.- La batalla que existe entre las barras más grandes del país parece estar llegando a su pico más alto. Luego de las cuatro muertes que se registraron el sábado pasado entre hinchas de Olimpia y Motagua, el Observatorio Nacional de la Violencia de la UNAH profundizó sobre el tema.
La preocupación es evidente, pero los números que publican son escalofriantes.
El informe
La autoría de los hechos aludidos, que se adjudican en principio a las barras han ido en incremento, y desde 2017 se registran 35 muertes violentas, ese año 14 personas murieron, 10 homicidios fueron ejecutados de forma intencional y 4 víctimas por asfixia en la entrada al Estadio Nacional; en el 2018 murieron 9 personas; y lo que va del año 2019 han muerto de forma violenta 12 personas, destacando la barbarie utilizada en las muertes del sábado 17 de los corrientes.
En el estudio podemos ver que la mayoría de las muertes son jóvenes entre 20 a 24 años de edad, Sin embargo, también hay un menor de edad en el conteo. La mayoría de los fallecidos son hombres (32), solo tres son mujeres.
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Recomendaciones
El Estado debe asumir la responsabilidad de la investigación de estos hechos a profundidad, y diferenciar las relaciones: barra, pandilla y crimen organizado, pues solo investigando cabalmente estas organizaciones y sus hechos pueden tomarse las decisiones correctas.
Las 35 víctimas y sus familias tienen derecho a una investigación y a que los responsables de los crímenes sean llevados a la justicia y que sean castigados.
