Tegucigalpa, Honduras
Han pasado 18 fechas y un repechaje y a Carlos Restrepo, DT de Olimpia, nadie le saca una frase polémica sobre su enemigo; esta vez va contra Motagua, el rival al que todo buen olimpista quiere eliminar más que a ningún otro equipo, y el colombiano sigue aferrado a su repertorio diplomático.
Lo que sí es cierto es que el Piscis fue el primer entrenador del Blanco que le ganó una final a Motagua (luego lo hizo Héctor Vargas) y algo de hacerle buenos partidos al Ciclón Azul debería saber. En la previa del clásico de mañana, el cerebro de la primera Liga Concacaf para los Leones analiza un juego que va a paralizar a medio pueblo.
¿Cómo prepara este primer duelo, profesor?
Estamos motivados por enfrentar una nueva serie que sabemos será determinante; esperamos tomar las mejores decisiones, que es lo más importante en estas fases.
¿En qué ha hecho mayor énfasis estos días?
Conceptos en relación a cómo se para nuestro rival, cómo contrarrestarlo, saber dónde es más fuerte, así que esperemos estar atentos a los detalles para sacar este primer partido.
A la gente no le termina de gustar la forma cómo juega su equipo.
Es más que respetable. Yo tampoco estoy muy completo sobre lo que queremos ver de nuestro trabajo y por eso hay que insistir, ya que nosotros venimos luchando e intentando sacarle lo mejor a estos muchachos; logramos ir sorteando factores, conseguimos la Liga de Concacaf y ahora se viene la fase decisiva de la Liga Nacional, por eso estamos haciendo todo el esfuerzo para que alcance.
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¿Va sin excusa al tener el plantel completo?
Hablar de completo en el fútbol es muy difícil. Ustedes ya saben lo de Andrés Quejada, que lo perdemos para el resto del torneo, Jonathan Paz apenas viene regresando; Carlo Costly va tomando un poco más de ritmo. Ahora está el escoger un 11 que sea muy solidario y trate de manejar con mucho temple el partido para sacar el gane.
Está claro que Motagua avanza con dos empates, ¿no es así?
Sí, claro. Hay que saber manejar los 180 minutos y mirar en qué momento se hacen los esfuerzos. Desde el primer partido vamos a buscar la serie con mucha inteligencia y no por el hecho de saber que el reglamento está a favor del rival nos vamos a desesperar.
¿Cómo define al rival que enfrentarán?
Un equipo muy completo, con mucho tiempo de trabajo, equilibrado y que conoce su idea de juego.
¿Llega mejor Motagua, entonces, por el tiempo que tiene de estar junto?
Ayuda mucho el que haya una idea, ellos se comportan bien y en el tiempo han ido complementando una nómina a la que de pronto le hacen uno o dos cambios, pero permanece la fortaleza de la base y por eso le han tomado la medida al campeonato.
¿Cómo toma su tercera experiencia en semis?
Estas son instancias donde lo más importante es cómo llegan los jugadores, hay que dejarlos que se metan y que no los vaya a traicionar la parte emocional, tratando de buscar cosas o rivalidades que los saquen del partido. La fortaleza estará en encontrar de nuevo ese Olimpia que ha hecho juegos importantes, redondos.
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¿Hay Carlos Restrepo para largo si no pasa esta llave?
Vamos a ver. Yo simplemente trabajo, casi nunca miro eso porque me confunde. Si me voy me voy y si me quedo me quedo, ya llevo 39 años trabajando, a mí no me afligen esas cosas.
Lo más importante es la seriedad con la que uno se entrega al trabajo o que quede una huella; entrenar muchos lo hacen, pero enseñar, pocos. En mi carrera me he caracterizado por ir dejando enseñanzas...
En el ambiente se vive un favoritismo para Motagua. ¿Eso le quita presión?
No, eso es normal ya que Motagua ha hecho las cosas bien y si recibe el favoritismo es porque se lo merece. Es un equipo que en el último tiempo ha hecho grandes campeonatos y es el vigente campeón.
¿O se ve usted con el favoritismo por el trabajo que dice haber realizado?
No, nunca. Yo siempre trato de llegar con perfil bajo, no me interesa el protagonismo, ni mío ni del equipo, las cosas se demuestran dentro de la cancha y lo vamos a mostrar ese día. Al igual cuando se pierde hay que reconocerlo.
¿Está con el sueño latente de estar en la final?
Siempre, estamos ahí. No solo hay que vivirlo de manera personal, sino hay que transmitirlo. Yo creo que nosotros estamos con la ilusión, como seguramente Motagua también.
